miércoles, 30 de diciembre de 2009

Cambiar el paisaje desde adentro...

















Aquí vengo de nuevo a sentarme junto a ustedes en este balcón lleno de flores, que no conoce de distancias ni latitudes (el invierno arrecia con su manto blanco en el hemisferio norte, y aquí en el sur, es agobiante el calor).
Pero este rinconcito está ajeno de temperaturas extremas, y puede ser lo que ustedes deseen: cálido o refrescante, lo que el estado de ánimo les pida…sólo vengo a compartir un momento de estos días que transcurren sin grandes cosas que los hagan brillantes, al menos han sido días sin grandes sobresaltos.
Esta quietud aumentada por la falta de mejoría supone una lucha cotidiana también para no permitir que la falta de fuerzas físicas le resten fuerzas a la mente y conservar las ganas de hacer cosas, aunque simples y triviales tal vez, para el común de los mortales, jaja, pero no dejar de hacer algo y hacer que los días sigan contando para Jehová y no vivir en vano. Ya lo dijo el sabio: Todo lo que tu mano halle que hacer, hazlo . . . (Eclesiastés 9:10)…claro que yo no quiero irme a ningún lado ni acortar camino al Paraíso y sigo anhelando poder ser, si Jehová lo permite, uno de esos millones que ahora viven y que tienen la oportunidad de no morir jamás…

Gracias por tantos y cada uno de los mensajes llenos de amor y preocupación que han enviado, no dejo de sorprenderme y conmoverme con cada uno y palpar también de este modo, lo maravillosa que es esta bendita hermandad mundial que nos une, un verdadero anticipo del Paraíso, y sin duda, una manera muy importante como Jehová los está usando para dar consuelo…gracias por sostenerme…gracias por seguir sosteniendo nuestros corazones en la distancia, por sus oraciones y mensajes…gracias por estar y por tanto que dan…

Quisiera poder decir que ya a esta altura las cosas vayan mejorando, pero no, ni siquiera puedo estar como antes del tratamiento y sigo dependiendo del todo de los demás, me da pena recargarlos más de trabajo, sí, lo hacen con todo el amor, pero al menos me gustaría poder levantarme sola y atenderme aunque mínimamente como antes, pero por ahora hay que seguir esperando y no dejar que la espera desanime. ¡Así es que hay razones extras para seguir fortificando la mente para actividad! (1 Pedro 1:13)

Claro que a esta mente no se le puede pedir mucho: con una sóla Neurona disponible no se puede hacer mucho que digamos…y ya a estas alturas…creo que ni Neuronita es…ya es media neurona…o un cuarto de neurona…pero bueno…hay que esforzarse porque siga en movimiento, jaja.

Esta debilidad extrema no deja mucho margen de opciones de actividades desde mi silla de ruedas – camita, pero, mientras escucho las Revistas en Mp3, la Biblia, los cánticos, al menos he estado haciendo algunos fondos de pantalla para PC para regalarles con el Texto del Año de 2010 y algunas tarjetas con textos…disfruto mucho de hacerlas, pero cada vez cuesta más porque veo menos y es difícil seleccionar las imágenes cuando se ve todo tan borroso. Ojalá estas cataratas se detengan ahí y no sigan progresando porque no podrán operarlas y reemplazar el cristalino, es una cirugía común pero contraindicada en enfermedades del colágeno como las que tengo. Pero mientras siga tomando corticoides, las sigue “alimentando” y cada vez veo menos. Eso sí que es un pronóstico muy sombrío, literalmente.

Pero mientras se pueda, seguimos “dándonos maña” para hacer algo…¿les comento un detalle, quizás trivial?..bueno, tengo una pequeña muñeca que guardo desde la infancia, no tuve muchas pero esta sobrevivió el paso del tiempo, es chiquita (no me gustan las muñecas grandes) y siempre la iba guardando, tiene el pelito todo apelmazado ya, de vez en cuando aún le hacía ropita, generalmente a crochet. Se llama Elenita, por nuestra querida Tía Elenita, la misionera que nos hizo el estudio y mejor amiga de mi mami. Ahora había quedado con un abrigo de invierno, así es que había que hacerle algo de veranito urgente…¡pobre muñeca!...¡se estaba cocinando!
Traté de hacerle algo con un pedacito de tela, pero me cuesta más tratar de sostener la aguja de coser y es calamitoso cómo han quedado esas puntadas a mano!...pero bueno…algo salió…los detalles son a crochet, incluidos zapatitos y sombrerito: les dejo fotitos, no son muy nítidas pero algo se ven.
Tenía pendiente de dejarles alguna foto tomada durante el tratamiento también, allí se ve la máquina a la que me conectaban, en funcionamiento durante una de las sesiones del tratamiento. En la otra se ven restos de algunos de los hematomas que quedaban en los brazos días después de regresar a casa (aún quedan algunos).

Como sabía que iban a ser días muy difíciles, llevé algo que le diera un toque de ternura a ese ambiente frío: un gatito en su camita que me regaló Mati, nuestra querida amiga de Barcelona. Lo tenía en una de las mesitas, junto a Aristarco y los remedios diarios (en la otra estaba solo el respirador). Fue muy positivo llevarlo, sólo verlo me animaba, lo acariciaba y confortaba un poco por lo mucho que extrañaba estar en casa, rodeada de los afectos.
Pero también, se convirtió en la mascotita de la sala y todos los médicos, enfermeros, personal de limpieza, y visitas de los otros pacientes que entraban …todos se acercaban a mirarlo y mimarlo…se sorprendían, porque a simple vista parece de verdad. La cardióloga decía cada vez: -“ Yo sigo creyendo que está vivo”.
Sí, fue un toque de ternura en esos días tan grises, es precioso.

Hay tantas cosas que no podemos cambiar…pero hay tantas otras que sí podemos, con la ayuda de Jehová, siempre hay algún detalle que podemos añadirle a nuestros días para que sean un poquito mejores, aunque solo sean detalles, tal vez triviales, pero que disfrutemos y nos confirmen que siempre podemos hacer algo para pintarle una sonrisa a la vida y seguir luchando.
Y como cristianos, siempre tenemos mucho que hacer, tanto en el ministerio como en los detalles cotidianos, pues de eso se trata nuestra adoración: es nuestro modo de vivir que afecta a todo lo que somos y pensamos, las 24 horas del día. Y aún cuando bajo circunstancias extremas tal vez no podamos hacer cuánto quisiéramos, siempre podemos esforzarnos por aplicar más plenamente consejos sabios, como el registrado en 1 Pedro 1:13: ´Fortifiquen su mente para actividad, mantengan completamente su juicio; pongan su esperanza resueltamente en la bondad inmerecida que ha de ser traída a ustedes en la revelación de Jesucristo.´
¡Cuánto nos sostiene la esperanza, verdadera ancla del alma!
Con la ayuda de Jehová, podemos seguir cambiando el paisaje desde adentro y enfocar la vista en todo lo bueno y bello que aún nos rodea, y sobre todo, en las cosas eternas que no se ven.

Les dejo de regalo uno de los poemas de Lira que más profunda dejaron su huella desde la adolescencia, espero ustedes también disfruten de este:

Análisis
No duermas esta noche sin dar gracias
si dialogaste en paz con tu conciencia,
si puedes sonreírle a tus recuerdos
y entiendes la razón de tu existencia.
Quizás fue un día simple,
sin grandes alegrías,
sin ningún sacrificio.
Quizás sólo hubo un hecho
humilde, inadvertido,
que añadir a tu foja de servicio.
Si esa cosa pequeña,
puso un toque de gracia en tu faena,
fue un día bien vivido,
¡Todo valió la pena!
Si pronunciaste el nombre del Dios vivo
refutando el desdén del que reprueba;
si hablaste con amor de sus promesas
afirmando la fe de los que aprueban;
si encendiste elevados pensamientos
en la desolación de alguna mente;
si compartiste la pesada carga
de un alma que clamó desfalleciente;
si derramaste ungüento de palabras
sobre la carne que quemó el dolor;
tu tiempo es un esclavo bien comprado
que atiende tus asuntos con honor.

Tal vez alguien que oyó de ti el mensaje
cerró los ojos en un curso fiel.
Tal vez un hijo tuyo íntegramente
mide sus pasos en un mundo cruel.
Quizá hay quien siembre la verdad del Reino
con semillas tomadas de tu mano.
¡Da gracias por los días transcurridos!
¡No estás viviendo en vano!
Pero si nada de esto entra en tu análisis,
tu tiempo es un esclavo
enfermo y amargado,
que gime atado a un poste
porque no fue comprado.

Álef Guímel
(Del libro “Reflexiones de un Guijarro”)

Gracias por permitirme compartir este tiempo, sentada a su lado en este balcón etéreo lleno de flores, frente a un mar diáfano y azul intenso (**), mientras seguimos hablando con amor de Sus promesas, con la certeza de que es sólo cuestión de instantes ya, en esta corriente del tiempo, para verlas realizadas, para disfrutarlas juntos y hacer como dijo el salmista : “En cuanto a nosotros tu pueblo y el rebaño de tu apacentamiento, te daremos gracias hasta tiempo indefinido; de generación en generación declararemos tu alabanza.” (Salmo 79:13)

No me despido…me quedo aquí, con ustedes, mirando fijo las cosas que no se ven…¿me acompañan?...
(**) Vivo muy lejos del mar, y solo estoy en mi habitación...pero se puede cambiar el paisaje desde adentro...



sábado, 19 de diciembre de 2009

Abriendo ventanas de regreso...

Al fin puedo asomarme de nuevo por este rincón amado y volcarles en estas páginas lo vivido en estos días de ausencia. Los he extrañado mucho.
Ya ha pasado una semana desde que regresé a casa luego de la internación que estaba pendiente y les comenté en el mensaje anterior, aún no logro reunir fuerzas para retomar un poquito de lo que antes fuera la “normalidad”. Esperábamos que fuera una semana pero finalmente fueron 13 días...los más difíciles de todas las veces que me internaron. Fue muy duro para toda la familia.
Ingresé el lunes 30 de Noviembre para ese tratamiento especial que estaba pendiente. Sabíamos que no iba a ser fácil, pero surgieron varias complicaciones, algunas muy graves debido a mis enfermedades de base que complican todo. Regresé el sábado 12 de Diciembre, mucho peor de lo que había salido de casa debido a esas complicaciones, y a secuelas propias del tratamiento.En una conversación privada con Waldo, la Doctora le dijo que mientras hablaban de mi caso con el neumonólogo que me trata, éste le había dicho a ella: “ No sé cómo respira Nancy, su capacidad ventilatoria es así... (ínfima)” e hizo un ademán con los dedos juntando cerquita el pulgar e índice. (*)

Desde hace tiempo que en la historia clínica se menciona como parte del cuadro general “debilidad muscular extrema”...y seguimos empeorando, ahora no puedo quedar sola, necesito cuidador permanente y ayuda para todo, pero confío que con el paso de los días pueda al menos estar como antes de salir de casa y vaya mejorando un poquito cada día, Jehová mediante sé que así será pues hoy estoy mejor que ayer y que cuando regresé. Ayer la Doctora me dijo que es normal que esté así, que al sacar todos esos anticuerpos nocivos, también se fueron cosas que sí sirven y que de a poco se notarán los beneficios del tratamiento. También mencionó que había resultado ser muy fuerte al resistir todas las sesiones, parece que nos siempre es así.
Tenía hematomas muy grandes en los brazos ya están desapareciendo (aparte de otras lesiones en la piel). Pero van apareciendo otros en los pies y piernas, apenas los bajo se hinchan mucho y ponen morados y empiezan a romperse vasitos. Debe ser que luego pasará eso también.

Estuve en una sala de cuidados intensivos donde no permiten visitas, salvo la familia unos minutos para ayudarme en los horarios de las comidas pues no podía valerme sola. Las demás visitas solo eran de una hora a las 12 y a las 20 hs.
Tenía dos catéteres en el cuello, a ambos lados, que no me dejaban ni girar la cabeza del dolor, ni tratar de acomodarme un poco en la cama sin que tiren y duelan mucho.

Una de esas noches me pusieron un medicamento contraindicado en la Miastenia y me agravé mucho. Yo no dejaba de orar todo el tiempo, a veces sólo podía pedir a Jehová que no me dejara, otra que me de paz y ánimo, no podía ni pensar claro para expresarme mejor...pero Jehová escucha todo el tiempo...era increíble, cómo, aún sabiendo y conociendo todo lo mal que estaba y qué podía pasar...estaba tranquila, es literal como Él nos arrulla con su paz....¡qué maravilloso Dios tenemos!
“Aristarco”(**), con los Salmos y los cánticos nuevos, le hizo honor a su nombre y derramó profusamente el consuelo que hacía falta.

Esos días bajó bruscamente la temperatura y mi Mami enfermó muy mal de sus bronquios, todavía sigue con nebulizaciones. Me daba pena oírla llorar por teléfono porque no podía ir a visitarme y ayudarme a comer y turnarse con Waldo y Damy, al segundo día de internada cayó ella muy enfermita. Parece que luego le contagió a Damy, no le agarró tan fuerte a ella pero también sigue con tos y mal de la garganta. Pero lo mismo iba al sanatorio y ayudaba en todo. Hay muchas cosas envueltas y los veía esforzarse aún más allá de sus fuerzas.

Estas cosas suponen una prueba para toda la familia, no sólo para el enfermo. Por más que trataba de estar bien, sonriente, peinada y perfumada en los momentos en que los dejaban pasar, la angustia en su mirada era grande. Esa angustia que viene de la mano el agotamiento emocional y mental.
Jehová está al tanto de esos sentimientos no expresados, y sigue recogiendo en su odre las lágrimas de sus leales también por este motivo. Toma en cuenta los sentimientos y el dolor de quienes cuidan a un ser querido enfermo y amorosamente hizo provisión mediante su Organización, de artículos llenos de comprensión y consuelo como estos: g97 8/2 pág. 10 El cuidador necesita cuidados. Cómo proporcionárselos y g97 8/2 pág. 3 La difícil tarea de cuidar a un ser querido.
¡Tantos amados hermanos están pasando por momentos duros en su familia!...repasar estos artículos puede ser muy reconfortante...también para los amigos y hermanos de sus congregaciones que amorosamente quieren ayudar y a veces no saben cómo.
Hasta en eso Jehová contiene a sus siervos y ´llega a ser altura segura para el aplastado, altura segura en tiempos de angustia´. (Salmo 9:9)

Estoy feliz de estar en casita de nuevo, ése sólo hecho de por sí es una tranquilidad para todos y ya se reorganizaron las filas de batalla para enfrentar esta nueva etapa. Por ahora hemos hecho arreglos para que mis padres asistan a una congregación vecina con quienes compartimos el mismo Salón del Reino en distintos días, y Waldo y Damita siguen asistiendo a la nuestra.
De este modo, siempre habrá alguien cuidándome y nadie se perderá las reuniones. Y yo estoy feliz de poder oír de nuevo las reuniones por teléfono...¡me hacían tanta falta! Todos cooperan en casa de una manera u otra para cuidarme y son una verdadera bendición.
Hasta Lulita, que mece su pancita gorda de un lado a otro al caminar, nos llena de alegría y pinta ternuras en nuestros días.

Y como siempre, en medio de los nubarrones oscuros, siempre están esos dorados rayitos que de luz que reconfortan y acarician el alma: el amor de los hermanos, los mensajes llenos de preocupación y cariño, las visitas, las llamadas de teléfonos, tanto del país como de Chile y España...y hasta un poema precioso que dejaron aquí en los comentarios y si me permiten, quiero compartirlo con todos...pues todos, al ver a un hermano enfermo, compartimos el sentimiento y expresamos este...

CÓMO QUISIERA

(Dedicado a Nancy Luna)

Quisiera ser un pájaro, para volar raudo
cuando un amigo necesita un hombro
donde apoyar su desconsuelo

Quisiera velar el sueño de los que se ama
sin fronteras, ni nada que separe al hermano.

Quisiera tantas cosas que de querer quiero,
pero que de poder hacer, no puedo.

Poder, por ejemplo secar tus lágrimas
hermano, ordenar tu cabello y acomodar
tu almohada.

Acomodar tus mantas cuando estés dormido,
Apagar la luz para que no interrumpa el sueño...
Aaah, cómo quisiera...

Cuesta esperar el día en que sí se pueda,
En que ya no llores de impotencia ni
Exhales suspiros de nostalgia...

Más no seré yo quién lo haga, sino el Rey
que con una sonrisa extenderá su mano
invitándote a caminar descalzo...

Y correremos juntos, cruzaremos prados
y fronteras...sin detenernos siquiera.
Correremos hasta caer exhaustos en el pasto

Y antes que se acabe el resuello, estaremos
corriendo, otra vez , hasta alcanzar la playa
y la arena blanca que moja nuestros pies descalzos.

¡ Ay, cómo quisiera.... cómo quisiera....!


¡Muchísimas gracias...es precioso!


Si hay que hacer una evaluación de este tiempo...sí, fueron y son tiempos muy difíciles, pero en todos esos momentos grises, el poder protector de Jehová, su brazo tierno, su paz que supera a todo pensamiento…fue un bálsamo constante...Él estuvo sosteniendo cada segundo. No sé cómo expresar toda la gratitud que hay aquí adentro por tanto amor y cuidado de Jehová, no sé, como el salmista, “¿Qué pagaré a Jehová por todos sus beneficios para conmigo?” (Salmo 116:12).
En verdad...salimos fortalecidos, agradecidos y llenos de amor por Él...´

Hasta en los momentos más oscuros, su paz fue abrigo.

Gracias a cada uno de ustedes por su cariño, por acompañarnos en la distancia, por sus oraciones y por este amor que distingue al pueblo del Dios de todo consuelo...los quiero mucho y abrazo muy fuerte...

Nancy




(*) Es una insuficiencia respiratoria crónica por debilidad muscular, los pulmones están limpios, solo que no hay fuerzas para respirar...ni hablar...éso es muy grave para una mujer, jaja

(**) “Aristarco”: es el nombre que le puse al MP4 cargado con los Salmos, cánticos nuevos, el libro Acerquémonos a a Jehová, entre otros