martes, 20 de agosto de 2024

Parte Médico familiar


En el Discurso Público de este domingo, el conferenciante preguntaba: "¿Está pasando un problema grave de salud? ¿Ha sufrido la pérdida de un ser querido?¿Está cuidando de un familiar enfermo? " Y varias más a las que respondía afirmativamente en silencio. Son cosas que lamentablemente son comunes a todos, pero en nuestro caso se dan todas juntas al mismo tiempo. Y siempre al concluir cada día, vemos que solo pudimos transitarlo con la ayuda de Jehová.

Ahora hasta nuestro Cuidador, Waldo, está enfermito, y ya muestra signos del Síndrome del Cuidador, así que me preocupa cómo poder aliviar su carga: aparte de cuidarnos en casa y estar pendiente de todos (por los 7), hay mil trámites burocráticos relacionados con mis tratamientos y él corre para todo. Y ya las fuerzas no le dan.

Mamá ha estado muy, muy mal este fin de semana, tanto que no sabíamos si podría pasarlo. Ahora estamos esperando a que venga su médico de cabecera a casa a verla. Para muchas cosas de su estado general, en especial sus dolores intensos, no podemos hacer casi nada porque no tolera analgésicos. Duele mucho ver su sufrimiento diario y la impotencia. 
No pude escribir antes porque realmente no tengo nada de fuerzas y no podré responder los mensajes.
Pero, pondré en el Estado cómo sigue.

Mis plagas siguen su curso de deterioro diario, son tantas las cosas que pasan que me cansaría tan solo contar. Solo decir que, el dolor en todo el cuerpo sigue permanente así como la debilidad muscular grave (grave porque compromete músculos respiratorios). La saturación de oxígeno baja a 88 estando sentada en reposo, ni hablar al acostarme.

Esa falta de oxígeno también está afectando al cerebro y la vista. Y ya la neuróloga me está dando medicación que dan para síntomas de Alzheimer. Así que perdón si repito alguna cosa, no me doy cuenta.

Sigo intentando hacer los ejercicios de rehabilitación en casa. Uno de ellos es levantarse de una silla y volver a sentarse y de nuevo...parece una tontería....pero esa una de las cosas que más me cuestan, levantarme al estar sentada...y así ...todo...

Ahora hasta me cuesta mucho hacer las cosas que me gustan y que suelen ser un cable a tierra, como escribir, tejer, pero me obligo a hacerlo y seguir...

Sé que como siempre, como cada día y cada momento, Jehová seguirá dando las fuerzas que no tenemos y la salida. Con su ayuda seguimos aguantando y manteniendo la vista fija en lo que esperamos...

Abrazo enorme, los quiero mucho...