martes, 31 de diciembre de 2024

Mamá: una mecha que apenas arde...

He estado más ausente este tiempo porque la salud de mamá se deteriora día a día, requiere cuidados permanentes, día y noche, y mi salud también se ha resentido más debido a eso. Aún así, estamos agradecidos de poder cuidarla y hacer hasta más de lo que podemos para acompañarla en esta etapa tan dolorosa en que vemos cómo se apaga lentamente. Está con morfina para aliviar un poco sus dolores intensos.

Muchos de uds me acompañan durante muchos años y hemos compartido los momentos felices, los tristes, la alegría de la llegada de Jael y Mical a nuestras vidas y la despedida de los que amamos. 
Dicen que una carga compartida pesa menos y que las alegrías se duplican al compartirlas. Siempre han sido una fuente de ánimo contante para mí y nuestra familia y se los agradezco eternamente...

Ahora estamos transitando un valle de profunda oscuridad, física, mental y emocionalmente. Pero no lo transitamos solos. Jehová sostiene y aún en la incertidumbre nos da la seguridad de su protección y las fuerzas que nos faltan ...

Cuánto más densa la oscuridad, más brilla la esperanza que estabiliza el alma en la tempestad...

Que Jehová nos siga dando la fuerzas a todos, cada uno con sus propias batallas y ayude a ser fieles hasta el fin...

Los amo...