jueves, 24 de septiembre de 2009

Una página especialmente amada...



"Sembremos, que en algún lugar nos bendecirá la lluvia", José Narosky. Ésa es una buena premisa para aplicarla en toda faceta de la vida, pero sin duda, aplicada al ministerio cobra un brillo especial. Muchas veces los resultados aparentes de nuestra siembra espiritual no son muy deslumbrantes y todo lo efectivos que nos gustaría que fueran. Pero seguimos sembrando, mientras Jehová permita tiempo…no sabemos cuál será el resultado definitivo de lo que podamos haber sembrado en el corazón de quiénes tuvimos el privilegio en algún momento de enseñarles el Nombre del Supremo y sus propósitos.

Ése es el sentimiento cuando recuerdo a los niños que llenaban nuestra casita y jardín hace algunos años atrás. Permítanme contarles esta página especialmente dulce y amada para mi. En un mensaje anterior les comentaba del jardín que teníamos en nuestra anterior casita, en una ciudad vecina. Aunque fue un tiempo de remisión de la enfermedad, no estaba bien, solo “menos peor”. Pero podía caminar más y hacer algunas cosas, como cocinar y atender algo el jardín, entre otras cosas. Por un tiempo nos acompañó una hermanita y fue de gran ayuda, pero cuando se fue tuve nuevos ayudantes jardineros.

La casita era pequeña, y debido a mi discapacidad me permitieron escoger la ubicación, tenia que ser de fácil acceso, así es que estaba en el centro de un nuevo barrio de unas 360 viviendas. Estaba en una esquina de la plaza principal y en un principio, donde terminaba la vereda, empezaba la plaza, sin calle de por medio. Fue un tiempo bonito, porque al fin podía ver correr a Damita, para entonces de unos 7 añitos, siempre había estado en la cama al lado mío, en casa de mis padres, y ahora tenia toda una plaza de patio para jugar y correr.

El problema era que, como se llenaba de niños que iban a jugar al fútbol, la pelota solía terminar en medio de mis plantas…o de la cocina si tenia la puerta abierta. Así nunca podría tener un jardín frente a casa. Pero a la plaza no iban solo los niños del barrio, sino también de barrios circundantes donde lamentablemente, había mucha pobreza y delincuencia y se producía un marcado contraste entre unos y otros y no eran pocas las peleas que se armaban, muchas de las cuales terminaban envolviendo a los padres.

Para evitar que cuando jugasen al fútbol no hicieran el arco frente a la puerta de casa, tuve que armarme de gran paciencia, con oración e ir en medio de ellos y hablarles y pedirles por favor que se corrieran un poco. Como los trataba con cariño, les conversaba, les preguntaba sus nombres, y donde vivían y qué cosas les gustaban, de a poco fueron haciéndome más caso y ya venían a casa a visitarme luego de sus horas de escuela y juego. En poco tiempo, ya los tenía colgados, literalmente, del cuello y se me apegaron mucho. Siempre trataba de dedicarles tiempo para escucharlos, la mayoría tenía historias muy tristes con ambientes familiares marcados por la violencia, el alcohol y la pobreza.

Cada vez que salía a regar las plantas, se peleaban porque querían hacerlo ellos, así es que se turnaban para regar, todos querían participar, en todo: en podar las rosas, en sacar los yuyitos. Hasta hacerme las compras si estaba sola. Fueron una gran ayuda, y en gran parte, gracias a su cuidado, era la única casita frente a la plaza que estaba llena de flores, no dejaban que nadie se acercara a dañarlas y eran capaces de pelear si alguien cortaba una flor. Pero no tenían reparos en cortarlas de cualquier otro lado y siempre me traían flores.

Pero, lo más importante, es que mientras cuidábamos el jardín, iba sembrando en ellos otras semillas, imperecederas, las semillas de la verdad y enseñándoles a conocer y amar a Jehová. Les encantaba que les leyera el libro Historias Bíblicas y era habitual sentarse en la vereda y leer para unos 12 niños o más. Logramos establecer estudios definidos con 8 de ellos, sin contar a sus hermanitos que se sumaban. Claro, antes de formalizar un estudio ya había hablado muchas veces con sus padres, ellos estaban muy contentos, pero decían que no tenían tiempo para estudiar, pero que los chicos sí.

Fue un placer ver que crecían espiritualmente también y que nos acompañaran a las reuniones cada vez que podían y oírlos comentar, y un gozo inmenso verlos en la Conmemoración. Los muchachitos les pidieron camisas y corbatas a sus padres, primos, hermanos. De más está decir que varias corbatas de Waldo la heredaron ellos.

Hasta ahora me emociono cuando recuerdo cómo corrían detrás del ómnibus si veían que yo venía y estaba a una cuadra para bajar, ellos corrían por atrás y hasta llegaban primero a la parada y querían ayudarme a bajar y se colgaban a los besos y abrazos y acompañaban hasta la casa, casi sin dejarme caminar por lo abrazaditos. Recuerdo que el chofer una vez al verlos, me preguntó:
-“¿Qué les da…caramelos?”
Lo miré sonriendo y le respondí
– “No… Cariño”.
Sí, cuánta necesidad de cariño tenían. Y yo de dárselos.

Son muchísimas las anécdotas con ellos, realmente, no solo les impartimos las buenas nuevas, sino nuestras almas y llegaron a sernos amados de un modo muy especial en vista de sus circunstancias.Pero eran chicos, y no tenían el apoyo y contención espiritual de sus familias. Cuando tuvimos que regresar a casa de mis padres al empeorar mi salud, fue un duelo, más que despedida de ellos. Hice arreglos para que siguieran estudiando con otras hermanas y hermanos, pero con el tiempo descontinuaron el estudio. Era comprensible en vista de su entorno, de ser chicos y de remar solos.
Solo espero que, las semillas sembradas en el corazón, en algún momento vuelvan a germinar y busquen a Jehová nuevamente ahora que ya están grandes.
Pero el vínculo de amor que se forjó con ellos, sigue intacto. Algunos, a veces se cruzan toda la ciudad para vernos, como Clarisa, que siempre que puede viene a quedarse unos días en casa, es una hermana para Damita. Otras veces llaman por teléfono. Una de esas llamadas que me conmovió profundamente, fue la de Marquitos, quien ahora ya tiene dos hijitos aunque es muy joven aún, (cuando niño era uno de lo más rebeldes del grupo, pero llegó a apegarse mucho).
Hace poco me llamó y me dijo: “Lo que usted ha hecho por nosotros no lo ha hecho nadie, y eso nunca nos vamos a olvidar, para nosotros es nuestra madre”.
El haberlos conocido, tratado, enseñado y amado ha sido una bendición muy enriquecedora en mi vida, uno de los tesoros más valiosos que guarda el corazón.

Con todas las personas que estudié, pero especialmente con estos niños, 1 Tesalonicenses 2:7-8 es especial y particularmente cierto: “Nos hicimos amables en medio de ustedes, como cuando una madre que cría acaricia a sus propios hijos. Así, teniéndoles tierno cariño, nos fue de mucho agrado impartirles, no solo las buenas nuevas de Dios, sino también nuestras propias almas, porque ustedes llegaron a sernos amados.”

¡Qué bendito es nuestro ministerio! Que siempre recordemos que

LA SIEMBRA ESTÁ EN TUS MANOS

Guarda como un tesoro las semillas
que Dios puso en tus manos,
y busca diligente a los que han de apreciarlas.
El tiempo es muy escaso,
que no se escurra en vano.
Es urgente la siembra
y es mandato del cielo defenderla.
Hay que ayudar a muchos
que andan a ciegas sin reconocerla.
No dejes que las aves devoren la simiente
antes que eche raíz y se haga fuerte.
La están necesitando multitudes
que caminan al borde del foso de la muerte.

Se alza un canto de gozo entre los sembradores.
El surco está bendito para abrigar el grano.
Jehová lo ve de arriba y lo ayuda a crecer.
Hallarás mentes miopes que cerrarán los ojos
pues la luz les molesta y no quieren creer.
Pero hay otros orando en las densas tinieblas
esperando el mensaje que los ayude a ver.
No los pases por alto y jamás los ignores.
Extiéndeles la mano sin ningún titubear.
Los ángeles observan, deja que ellos te usen.
El tiempo de la siembra ya se está terminando,
luego vendrá el sublime premio de cosechar.
Aquellos cuyas manos se aferran a las tuyas,
buscando un rumbo cierto y sana orientación,
serán en el milenio tus amigos eternos,
bebiendo el agua pura del río de la vida,
nutridos por la misma fuente de inspiración.

Álef Guímel – Octubre 1997
(Del libro “Ramas y Nidos”)


Gracias por permitirme compartir estos recuerdos atesorados, mientras seguimos buscando maneras de sembrar, con las palabras de Eclesiastés 11:6 brillantes en la mente:

“Por la mañana siembra tu semilla, y hasta el atardecer no dejes descansar la mano; pues no sabes dónde tendrá éxito esto, aquí o allí, o si ambos a la par serán buenos.”

viernes, 18 de septiembre de 2009

Septiembre

Hay una algarabía tan grande de pájaros en el patio y el aire está tan lleno de perfume de flores….que parece que quisieran dar gracias por esta época tan linda del año. Tal vez ellos, si pudieran, escribirían un poema, así es que, haciéndome eco de su alegría, vengo a dejarles este poema a

SEPTIEMBRE

Cuando la luna de julio
tiritando atalayaba,
y agosto los verdes campos
de espesa escarcha alfombraba,
¡cuánto deseamos setiembre
poder tener tu llavero
y abrir bien anchas la puertas
por donde sale el invierno!
Mas, ¿quién podría sin ti
girar los dientes de hierro
del candado milenario
en los portales del tiempo?
¡Qué agradable es contemplarte
con ese garbo sereno
del que sabe su cartilla
del revés y del derecho!
Me parece haberte visto
pegar el oído atento
a los troncos de los árboles
escuchando el movimiento
de la savia que se afana
por nutrir los brotes nuevos;
o inclinado largamente
sobre los surcos abiertos
oyendo latir la vida
que hace fuerza desde adentro,
cuando las semillas rompen
el claustro de su aislamiento.
¡Cómo te esperan las larvas
que están forjando sus alas!
¡Cómo te esperan las novias
para pedirte guirnaldas!
¡Cómo palpita la tierra
de emoción bajo tus plantas!

Los pájaros te conocen
y se pasan la palabra,
y los insectos, que entienden
tu contraseña privada,
van despertando a la vida
y alegremente se enjambran.
Mientras tus umbrales brillan
con la rubia primavera,
vas despidiendo al invierno
por una puerta trasera.
Un sol rejuvenecido
lo ve salir encorvado;
lleva las uñas raídas,
lleva los dientes menguados.
Hay agujeros de luz
en su capa carcomida;
habla de recuerdos serios
e ideas enmohecidas.
Los viejecitos sonríen
arropados en sus capas
y se oye un coro de niños
que juegan a sus espaldas.
¡Qué bien que te enseñoreas
de todos tus privilegios,
con tus humores cambiantes
y tus vientos agoreros!
Septiembre henchido de promesas,
Septiembre lleno de sueños...
Mayordomo irreprochable,
¡cuánto rinden tus desvelos!

Álef Guímel
(Del libro “Reflexiones de un Guijarro”)

Voy a ver si me animo a estar un ratito en el patio para ver de cerca la actividad de los gorriones (creo que me están llamando), llenarme de su canto y contagiarme un poco del estallido de vida en las plantas…nuestra Primavera eterna también está por llegar…
Mientras tanto, ¿vamos al patio a tomar unos matecitos entre flores y trinos?

lunes, 7 de septiembre de 2009

Un poco de compañía


No sé en que momento se escurren los días, como agua entre los dedos. Y eso que no llevo una vida “normal”: con el ajetreo diario que supone atender un trabajo seglar, la casa, el precursorado y tantas cosas cotidianas que exigen tiempo y dedicación. Yo solo estoy quietita en mi cuarto, rara vez salgo al patio, y la mayor parte de las reuniones las escucho vía telefónica en la camita. Pero gracias a Jehová, a pesar de las limitaciones, siempre hay algo que aún podemos hacer, algo que ayude a mantener la mente y el corazón ocupados en cosas que animen y edifiquen, y dentro de lo posible, compartirlo con otros de alguna manera.

Una de esas cosas gozosas que pasaron con prontitud, fue la Escuela del Servicio de Precursor de Damita. No sé en que momento pasó el tiempo…me parece que fue ayer cuando estábamos tan emocionados porque ella había firmado la solicitud para el precursorado regular. http://paginasdenancy.blogspot.com/2008/08/uno-de-los-mejores-das-de-mi-vida.html Luego la expectativa por el nombramiento. Y después la posibilidad de ser invitada a la Escuela…y luego que ya empezarían las clases….¡y ya terminó!
Fueron dos semanas de muchos ajustes en lo familiar, pero llenas de gozo y bendiciones espirituales. Todos nos sentimos animados por ello.

Como siempre, esta salud es tan inestable, que nunca sé dónde estoy parada: un momento mejor y luego apenas viva…rogaba poder asistir al último día en que se invita a la familia al final del curso. Gracias a Jehová pudimos estar. Todo fue gozo y emoción. Yo miraba calladita, y daba gracias por estar allí y poder acompañar a nuestra hija en una ocasión tan especial. ¡Y tanto amor de los hermanos! Me esforcé por conversar un poquito, pero mi voz ya es un inaudible trino y quienes me hablan se tienen que acercar y tratan de hacer silencio para poder oírme. Sí, me agoté muchísimo, pero regresamos con el corazón lleno de gratitud y contentamiento y arropado por tanto amor y consideración de nuestros amados hermanos.

A estas alturas, cualquier esfuerzo extra, como el salir y tratar de hablar más, luego me pasa factura implacablemente, así es que estos días posteriores, he quedado demasiado debilitada físicamente y apenas hablo. ¡Pero aún puedo escribir!
No puedo dormir bien, y a la vez, estaba demasiado agotada para sentarme en la PC para leer en el CD Rom. ¡Pero cómo sostiene la oración! Eso es algo que siempre podemos hacer. Estabiliza la mente cuando se siente asaltada por inquietantes pensamientos…Jehová escucha hasta gemidos no expresados e ideas que apenas podemos coordinar para expresar coherentemente. Pero Jehová sabe. Y responde. Y arrulla con paz. Y despertamos al día siguiente sin saber en qué momento el sueño le ganó al dolor y malestar. Y estamos vivos. Y agradecidos.

Me preocupa pensar en cómo podrá este cuerpo aguantar nuestra asamblea de Distrito. Si tan solo una reunión agota tanto…pero mejor no adelantarse. Suficiente para cada día es su propio mal. No tengo grandes cosas que contarles, apenas viajé algo con la Neuronita que quería conocer algo más sobre los Faros en las costas de mares bravíos, en cuanto juntemos algo de fuerzas les contaré, si?
Pero al menos intentamos balbucear estas palabras por si precisas


Un poco de compañía

Estoy aquí, a tu lado.
Perdona que no tenga
grandes cosas que contarte.
Pero permíteme sentarme,
callada y quietita,
y acompañar tu soledad
si lo precisas.

Tal vez la inquietud y
el dolor de corazón
estén espinando tu alma.
No puedo curar tu herida,
pero puedo acompañarte
y dejar tu nombre amado
ante el trono del Excelso
que te mira con ternura
y ´salva a los que aplastados
en espíritu están.´
(Salmo 34:18)

No tengo grandes cosas que contarte,
pero déjame recordarte esta promesa
que consuelo y paz me dio:
Jehová con amor te mira
y es Él quien te dice
´yo mismo no me olvidaré de ti.
(Isaías 49:15)

Déjame quedarme,
aunque sea callada y quietita,
y traerte un poco de compañía,
y dejar en tus manos un colorido ramo
de flores de esperanza y consuelo
que sembró para nosotros
en Su Palabra, el Dios del cielo.

Dáleth
07-09-09


Bueno, este intentaba ser solo un saludo breve y al final termino pensando en voz alta…o mejor dicho…pensando por escrito.
Gracias por permitirme acompañarlos en la distancia, ojalá puedan las palabras tratar de devolver algo de todo el bien que su cariño me acerca cada día.

Uy…no sé en qué momento se escapó el día…ya la noche está dormida y el alba está alistándose para entrar en escena…me voy a acostar para que no me sorprenda enredada entre anhelos y palabras que les dejo para que les acerque el viento…

sábado, 29 de agosto de 2009

Anécdotas entre nidos y jardines





“Volverán las oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar”, dijo el poeta…bueno…no regresaron precisamente golondrinas, ¡pero sí gorriones! Hay una algarabía matinal debajo de la galería, sobre la ventana de la cocina (no precisamente en mi balcón, jaja), pero son tan bellos y llenan la casa de alegría con su canto…sin contar cómo a Lulita, nuestra gatita, se le alegran los ojitos persiguiendo con la mirada los incansables vuelos de los pajaritos, trayendo ramitas para el nido y quizás alimentos.
Otra vez desplumaron el mismo helecho de mi mami, ése en especial les gusta.Parece que ya les gustó la idea de regresar para anidar, lástima que no les pueda hacer un letrerito como los que hago con las tarjetas, que diga: “Maternidad de Pájaros”, me gusta saber que en el patio hay un lugar que ellos ocupan, un lugar asignado por ellos mismos, pero que traen alegría a todos.

Parece que estos días cálidos (hoy hizo 37 Cº) y tal vez un nuevo remedio que estoy tomando, no sé, pero algo ayudó a que hoy haya estado un poco mejor y por primera vez en lo que va del invierno, me recosté en la reposera un ratito en el patio, quería ver a los gorriones. Pero como tenía que estar muy cerca para poder verlos, los ahuyentó mi presencia en medio de su ruta de vuelo. Así es que regresé pronto adentro de la casa para no molestarlos…y regresaron con sus ramitas en el pico y su canto.

Pero esos breves minutos los disfruté mucho…me encanta estar al aire libre y sentir la brisa en el rostro. Quizás, si mejoro un poco más pueda asistir a las reuniones, y tal vez hasta dar una vueltita en la plaza en mi silla de ruedas-camita todo terreno y hasta tomar unos matecitos al aire libre…sería lindo.
Por lo pronto, en ese ratito que estuve en el jardín recibiendo todas las sensaciones y mensajes del cielo azul, las flores, pájaros…la mente viajó a uno de esos grandes jardines, más bien parques, como los que decoran los castillos de Francia, Inglaterra o España, tan bellos y bien diseñados, donde la creación y el buen gusto del hombre se combinan para pintar bellos cuadros que reconfortan los ojos y el espíritu. Así sea en mi silla de ruedas…cuánto disfrutaría de poder recorrerlos…con cuánta más razón será un disfrute en el paraíso…

Pero para poder ayudar a la imaginación con datos concretos, fuimos con la Neuronita ( la única que me quedó) a dar un “Un vistazo a algunos jardines famosos” (g97 8/4 pág. 6). Entre muchas otras cosas interesantes, allí se menciona que los jardines ´del Palacio de Versalles “todavía pueden considerarse los más extensos y sublimes del mundo”.´
Me encantaria tener ( y hacer) un jardín japonés…creo que viviría en el jardín si lo tuviera...ahhhhh!! ¡qué belleza! Hay datos muy lindos para quien le interese en este artículo: *** g93 22/6 pág. 25 Los jardines japoneses: naturaleza en miniatura ***

De los jardines en Israel se cita esto: “En términos generales, los jardines a los que se hace mención en la Biblia son bastante distintos de los jardines comunes de Occidente. Muchos de ellos se asemejaban a parques donde había árboles frutales y de otros tipos (Ec 2:5; Am 9:14; Can 6:11), plantas de especias y flores. (Can 6:2.) Estos jardines estaban bien regados por arroyos o por otros métodos de riego, y a menudo había senderos serpenteados. Algunas familias tal vez hayan cultivado jardines más pequeños.” *** it-2 pág. 17 Jardín ***

Muchos de esos jardines podían ser jardines cerrados, con una reja o muro alrededor a los que se podía entrar con una llave.Hay un jardín al que la mente regresa, aún sin haberlo visto nunca…bueno, no lo vieron los ojos físicos, pero sí a través de las palabras y ojitos de Lira. Hacía falta una llave para entrar en él…hoy necesitamos este poema para visualizarlo:

NO TIRES ESA LLAVE

Aunque el viejo candado
se perdió en la mudanza,
no tires esa llave
que me está abriendo el paso
a tantas remembranzas.
Quiero bañarla en plata
y tenerla a la vista
como un adorno raro.
Quizá solo yo entienda
que esa anticuada llave
tiene un mensaje propio,
que sintetiza en clave
muchos recuerdos caros.

Ella abría la puerta
de aquel patio enrejado,
colmado de jazmines y claveles en flor,
donde en noches de estío la familia reunida,
conjugaba en voz tierna
los mejores sentidos de la palabra amor.
Ese patio florido,
nos vio pasar de blanco
para ir a la escuela,
mientras mamá cumplía el casero trajín,
y retornar ansiosos por las tortas horneadas
y el humeante cacao, como diario festín.

¡Cuántas cosas sencillas formaban nuestro mundo!
El corazón en calma, inquiría el profundo
sentido de la vida, sin conocer a Dios.
Él vio nuestros desvelos, y en un bendito día,
nos dio la Biblia abierta, y allí estaba su voz.
Mas tarde, nos marchamos para labrar caminos
que nos llevaron lejos de aquel patio añorado.
En la réplica exacta que se grabó en mi mente,
aún revolotean los pájaros errantes
y los jazmines que abren, perfuman como antes.

Por eso te decía, no tires esa llave,
pues si un día se ofusca mi borrosa memoria,
ella quizá me ayude a trasponer las décadas,
a revivir nostalgias, atizando rescoldos
de días que aún guardan un reflejo de gloria.

Álef Guímel - (Julio 1993)
(Del libro “Ramas y Nidos”)

Es bello…sigo sentándome, mentalmente, ´en aquel patio enrejado, colmado de jazmines y claveles en flor´

Esto me hizo recordar una vez hace pocos años atrás, cuando fuimos a Buenos Aires para que me hicieran una biopsia de músculo en un brazo. Estaba menos peor que ahora y podía caminar algo, además, el clima me había sentado muy bien, tanto que, cuando me dieron de alta del sanatorio, fuimos con Waldo a visitar Betel y almorzamos allí, junto a nuestras queridas misioneras que sirvieron tantos años aquí. Tomaba menos corticoides entonces y no estaba tan hinchada como ahora, es la foto en la que estamos con Waldo a la entrada de Betel ( Argentina).(1º foto)

No quería que regresáramos sin conocer aunque sea algo (no podía andar mucho), entre otras cosas: el Jardín Botánico, donde para entonces, nos dimos con la gratísima sorpresa de que había una exposición de Orquídeas. Estaba fascinada con tanta belleza y diseño exquisito. ( 2º foto)

En estos 16 años de enfermedad, hubo 3 en los que estuve mucho mejor y sin corticoides. Teníamos una casita pequeña entonces y un jardín lleno de rosas y una gran variedad de flores y plantas. Había un rosal blanco que se llenaba de flores y les gustaba a los vecinos. En la foto donde estoy de remera azul pueden verlo. ( 3º foto)
Andaba con un banquito o con la silla de ruedas para poder regarlo, limpiarlo de malezas, sembrar y trasplantar.Claro, sola no podía atender tantas plantas, estaba mejor que ahora pero no estaba bien y todo movimiento me agotaba y aumentaba el dolor, además, en el patio del fondo de casa había más. Pero tenía varios ayudantes…otro día les contaré de ellos, es una historia tierna que merece capítulo aparte.

Al agravarse mi salud tuvimos que vender esa casita y venir a vivir con mis padres. Menos mal que a mi mami también le encantan las flores, así es que un jardín no falta.
¡Uy!...no sé en qué momento la Neuronita se escapó desde el nido de los gorriones en raudo viaje hasta los jardines de Versalles, los del Israel antiguo, el de Lira, el Jardín Botánico y nuestra casita anterior…gracias por acompañarme en este florido recorrido.

En medio del viaje, se enredaron flores en el cabello y las manos están llenas de ellas para dejárselas a ustedes en señal de cariño y gratitud.

Un abrazo muy fuerte, anhelando el día en que la tierra toda sea un bendito jardín que ensalce a nuestro magnífico Hacedor:

“Porque como la tierra misma produce su brote, y como el jardín mismo hace brotar las cosas que se siembran en él, de igual manera el Señor Soberano Jehová hará brotar justicia y alabanza enfrente de todas las naciones.”
(Isaías 61:11)




lunes, 24 de agosto de 2009

Compartiendo recuerdos y anécdotas queridos





Aquí venimos con la Neuronita a saludar y dar señales de vida, algo que me anda costando más cada vez, pero no quiero que pase otro día sin dejarles algunas de nuestros recuerdos y cositas cotidianas, sujetadas con un gran lazo rosado de cariño profundo.
A estas alturas ya debería acostumbrarme (o quizás no?), a este decaimiento y debilidad siempre en progreso que no dejan mucho margen a los ánimos para que se muevan y hagan todo lo que desearían. Sí, por un lado es bueno aceptar la realidad para no frustrarse por lo que no se puede hacer. Pero por otro…siempre hay la esperanza de tener aunque sea lapsus o pequeñas treguas que den respiros momentáneos de algunos minutos, los que aprovecho inmediatamente para hacer algo, como ahora.

Pero a pesar de todo, con la ayuda de Jehová, seguimos librando las batallas cotidianas y consiguiendo pequeños logros. Por ejemplo, aquí entre nosotros, les cuento que estoy trabajando!...sí!...claro, sin moverme de la cama o lo sumo calzándome bien los brazos en la silla de ruedas. ¿Recuerdan que estaba haciendo canastitas con flores y peluchitos? http://paginasdenancy.blogspot.com/2009/07/tejiendo-suenos.html
Bueno, ni yo puedo creer que, gracias a Jehová y la ayuda de Waldo y Damita, hemos podido hacer algunos envíos a Buenos Aires y a España. ¡Todo un logro! Sí, me canso y duele más...pero estoy contenta.
Una querida amiga, pidió algunas para regalarlas a otra hermana que asistirá a la Asamblea Internacional de Chile, como ella no puede ir, quiso participar de algún modo en su viaje dándole las canastitas para que regale a los hermanos a modo de souvenirs. A esas le puse un letrerito que dice “Cariños desde Argentina”. Me ilusiona mucho eso. Como dijo Norita, mi amiga al recibirlas: “No sabemos dónde irán a terminar su viaje”.

Sí, yo tampoco podré asistir a esa Asamblea en Chile tan especial, (esperamos que Waldo y Damita ), pero pensar que lo que en la quietud de mis días, escuchando la Biblia o revistas en audio, descansando entre punto y punto, se fue tejiendo con amor…pueda llegar a las manos de hermanos de lugares lejanos que probablemente nunca conoceré…me llena de ilusión…es como si yo misma, de algún modo, me fuera enredada entre hilos y flores, a la Asamblea y a distantes lugares. Ahhhh!!!...me gusta pensar en eso, hace que el brazo duela menos y siga tejiendo anhelos.

Patricia, otra amiga de Buenos Aires, tuvo gestos muy lindos, como sacarse fotos con la caja de canastitas cuando las recibió, y luego al regalarlas a algunos hermanos, como ser, a su Superintendente de Circuito y esposa luego de un almuerzo en su casa, están todos con una canastita en la mano mirando a la cámara. Me sentí parte de ese momento al ver la foto, llena de gratitud por recordarme en momentos gratos compartidos con queridos hermanos. Sí, sigo encerrada aquí…pero en más de una forma viajo hasta donde estén. Viajo en los afectos.

Waldo y Damita estuvieron muy enfermitos este mes, pero gracias a Jehová ya están bien. Gripe (no la chanchita), anginas, catarros, se instalaron fuerte en casa y caímos todos enfermos, males propios del invierno, pero poco a poco retomaron su puesto de ofensiva y siguen luchando con lo que trae el día.

Algo que nos llena de felicidad es que Damita empieza hoy su Escuela de Precursor…es un gozo inmenso por partida doble, por ella, por ver sus esfuerzos y la bendición de Jehová al ir alcanzado metas. Y por el gozo como padres de verla disfrutar de su ministerio, es una bendición. También es como si nos desdobláramos en ella y reviviéramos algo tan especial que en su momento y lugar, pudimos disfrutar Waldo y yo; él en Bolivia, y yo aquí, en Tucumán. Y ahora nuestra hijita. Son bendiciones derramadas como bálsamo, no es fácil tener a la mamá enferma durante casi toda su joven vida. En verdad tenemos el corazón rebosante de gratitud.

Una foto muy tierna que adorna el escritorio en el living, es la primera que compartimos aquí. Ayer, mientras preparaba su libro de Precursor para su primer día de clases, me miró sonriente y dijo: ” Me gusta estudiar”. Le dije que esas palabras son música para los oídos de todo padre, y más cuando están relacionadas con aprender de Jehová y su Organización. Y recordé esta fotito, tenía escasos meses, era tan chiquita, nació prematura, de poco más de 7 meses. Pero desde que nació ya tenía su Biblia tamaño bolsillo con su nombre, su cántico y toda la literatura para cada semana, incluso su bolsito, se lo poníamos encima en su cochecito y así la llevábamos a las reuniones. Y obviamente, tenía su libro Historias Bíblicas, el que le leíamos cada día. Era tan chiquita que el libro era más grande que ella y le cubría gran parte del cuerpito….bueno…no sabía leer para entonces, pero como verán, ya se “alimentaba” de su libro…¡se lo está comiendo!
Le encantaba su libro, realmente ya lo disfrutaba.
Como en todos los momentos especiales de nuestras vidas, me hubiera gustado tanto compartir estos sentimientos con nuestra querida Lira, será otra cosa valiosa que contarle cuando resucite. Pero sí estuvo cuando Damita se bautizó a sus siete añitos (ahora tiene 19) y le regaló este poema tan querido:

A una niña que hoy se bautiza

Muchachita teocrática que adornas nuestro pueblo,
¡qué emocionante gozo es ver como te entregas
en sumisión completa al agua del bautismo!
Que cada paso tuyo de ahora en adelante,
Te lleve hacia la vida, muy lejos del abismo.

Como una flor sin mácula, consérvate así, pura;
que nada desmerezca tu registro cristiano
ante los ojos santos del Dios de las alturas.

Vas a entrar en un pacto por tiempo indefinido
con el eterno Dueño del tiempo y el espacio.
El siempre está en su guardia y jamás ha dormido.
Con esa edad tan breve,
que es un suspiro apenas ante la eternidad,
tu nombre representa en archivos del Cielo,
a un ser que ama la vida y anuncia la Verdad.

Las huellas que se marquen hoy con tus pies mojados,
señalan el principio de tu nuevo camino.
Dejando atrás el mundo que marcha hacia la muerte,
has de nacer de nuevo por decreto divino.

Aunque somos tan solo una mota de polvo,
Dios nos ha concedido valor e identidad.
Como esclavos felices a Él nos dedicamos,
y El nos pone una marca, que es su Nombre, Jehová.

L.B (Lira Berrueta)
Octubre de 1997

Fue un regalo muy bonito que atesoramos con especial cariño.
Por supuesto, nadie puede dormirse en los laureles del camino recorrido y todos tenemos que seguir obrando nuestra propia salvación con temor y temblor cada día (Filipenses 2:12). La última asignación que todos tenemos es aguantar hasta el fin (Mateo 24:13).
Pero es bonito recordar estos detalles, son como puntadas que fueron tejiendo nuestra vida cristiana. En especial cuando la brecha entre lo que anhelamos hacer y lo que permite el cuerpo es tan grande…hace bien barnizar los pensamientos con momentos que brillaron de manera singular a lo largo del camino. Gracias por permitirme compartirlos con ustedes.

Les dejo un abrazo entretejido con recuerdos calidos, afectos y florecitas de colores.


Con amor fraternal
Nancy


miércoles, 12 de agosto de 2009

Flores y viento...


“Para que te pongas contenta porque ya se acerca la primavera” . Eso fue lo que dijo Waldo al darme un regalo muy hermoso: una florcita de lapacho amarillo y otras de ceibo. Sí, puede parecer muy sencillo, pero valiosísimo regalo, no sólo por el gesto, sino por lo que significa: ¡ya se va a ir el frío!

Agosto y sus vientos ya se instalaron por estas latitudes sureñas. El viento tiene mucho trabajo por hacer: está empujando al invierno para que siga su viaje al norte; está terminando de limpiar los árboles de hojas secas, alistándolos para vestirlos en breve de verdes renuevos. Está preparando el alma para expectativas nuevas.
Qué bueno recordar, que tanto en lo que a clima se refiere, como a situaciones difíciles en la vida….la primavera siempre vuelve.

Me gustó mucho una frase que citó un hermano en un discurso sobre el desánimo: “No hay árbol que el viento no haya sacudido”. De una manera un otra, todos de nos vemos sacudidos a veces por situaciones difíciles que pueden desanimarnos. Recordé entonces un texto que había leído días atrás y que me ayudó: Isaías 30:15: “Su poderío resultará estar simplemente en mantenerse sosegados y en confianza plena”.

Sí, a pesar de sentirnos muchas veces tan frágiles e impotentes como hojas en el viento, podemos ser fuertes si simplemente dejamos descansar el corazón con plena confianza en Jehová. Esa expresión “simplemente”…es como si te dijera: ´no importa lo grande que sean los problemas, no importa cuán fuertes soplen los vientos, resultarás fuerte por simplemente mantenerte sosegado y confiar plenamente en Jehová.´ Claro, nos esforzamos por hacer todo lo que esté a nuestro alcance, aún en situaciones que sólo el Reino solucionará, trabajamos por lo que oramos. Y esperamos en Jehová.

Hablando del viento y su faceta positiva, recordé este poema, bello y profundo, que nos habla de

La actividad del viento

La actividad del viento trae un mensaje en clave
que al corazón sensible le hace bien descifrar.
No es un viajero ocioso sin norte ni destino,
tiene un itinerario asignado en el cielo,
y misiones exactas en su incansable andar.

La actividad del viento esparce las semillas
y surgen plantas nuevas donde nadie plantó;
así extiende la vida hacia tierras yermas
donde caen tantas flores que nadie contempló.

Las islas tropicales bajo soles ardientes
esperan cada noche su insistente ulular,
porque les trae frescura, hace grato el descanso,
y arrulla la fatiga del diario trajinar.

Si alguna vez, amigos, mi vida se hace inútil,
si ya no tengo nada latente que ofrecer,
acérquenme el perfume de los nuevos plantíos,
háganme ver que queda buen trabajo que hacer.
Tráiganme, igual que el viento, las esencias viajeras
de tierras que no dejan jamás de florecer.

Si vieran algún día decaer mi entusiasmo
y estancarse mis sueños en sedentario andar,
si comprueban que albergo ideas infecundas,
ilusiones frustradas que no florecerán,
sacúdanme con fuerza, arranquen lo superfluo,
como el viento de otoño que desnuda las ramas
mientras la savia afirma que reverdecerán.

Bendito sea el viento con su paso dinámico,
llevando ansiado alivio a la tierra afiebrada,
transportando semillas, arrancando hojas muertas,
esparciendo perfumes en las noches calladas.
¡Qué grato es cuando avanza con mesurada calma,
logrando tantas cosas que le hacen bien al alma!.
Álef Guímel
(Del libro “Ramas y Nidos”)
http://www.escritoresteocraticos.net/



Me despido por ahora con un poco de brisa y florecitas de lapachos amarillos y ceibos que les dejo en sus manos…(y me dejé algunas en el cabello...pero que no se entere el viento...)

Con cariño fraternal

Nancy
PD: El Ceibo es la flor nacional argentina, y en toda la vereda frente a casa hay lapachos amarillos, como los de la foto, las flores rojas son ceibos.

jueves, 6 de agosto de 2009

Las andanzas de tres Tornillos inoxidables


Estaba buscando algo para nuestros queridos precursores y me quedé releyendo otra vez este hermoso relato, espero disfruten de

Las andanzas de tres Tornillos inoxidables

Hace un cuarto de siglo que Sandalio Caminos vive en la Avenida de la Fe número 777, frente a la Plaza de la Perseverancia. Desde que está en esa dirección, se ha hecho conocer de todo el mundo como predicador ambulante de buenas nuevas. Cultivó el hábito de estar satisfecho y feliz con el pan de cada día, y se hizo carne en él la seguridad de que Dios está cuidando del día de mañana cuando nos ocupamos diligentemente de los deberes de hoy. Es un artífice de la economía. Jamás desperdicia nada, ni tiempo, ni energía, ni salud, ni bienes materiales. Por eso siempre tiene de todo para dar y siembra a manos llenas.
Le encantan los relojes y dialoga amigablemente con ellos. Su melodía preferida es “La Danza de las Horas”. Sus pies lo llevan prácticamente a todas partes. El único auto que tiene disponible es su auto determinación. Si alguna vez se presentan problemas con el arranque, basta un empujón espiritual para ponerlo en marcha.
Sandalio condujo un estudio bíblico en la zona rural con el matrimonio Gramos y su hijo adolescente, hasta que los tres llegaron a la dedicación. Los padres del jovencito lo animaron a hacer del precursorado la carrera de su vida, y lo enviaron a vivir y trabajar con el hermano Caminos para que se beneficiara de su madurez.
A pesar de la marcada diferencia de edades, Sandalio Caminos y Lolo Gramos llegaron a ser compañeros ideales. Todas las mañanas van juntos de casa en casa; a veces para variar van de puerta en puerta. Por la tarde vuelven para comprobar el crecimiento de las semillas espirituales que han esparcido. Jamás permiten que el herrumbre de la inactividad se asiente sobre ellos, ni la pereza los ponga fuera de combate. Se mantienen ágiles y saludables trabajando una extensa zona, y son prueba viviente de la veracidad del dicho: ”Una manzana por día aleja al médico”.
Los jóvenes encuentran estímulo y ejemplo constructivo en Lolo, y le brindan su amistad. A veces le dicen bromeando: -¿Por qué está en plural tu nombre?¿Es una indicación de que vales por muchos?.
Y el responde: -En la obra de Dios los logros no son nunca de una sola persona; todo lo hacemos entre todos. No me gustaría llamarme Lolo Gré.
Al cabo de algunos años de estar juntos le añadieron una pieza a la casita, porque Lolo Gramos había decidido casarse con Linda Eficacia. Lolo y Linda han seguido siendo excelentes precursores después de la boda. Sandalio ya no tiene la fuerza de sus mejores años, y ellos se ocupan de predicar en los lugares más alejados para que él no tenga que caminar tanto.
Los tres siguen trabajando incansablemente como representantes de único gremio que jamás hace huelgas ni recomienda jubilaciones. Los valores espirituales que han fijado en su lugar nunca fueron devaluados. Las cosas dignas y nobles que han atornillado a la altura en que debían estar, jamás las han dejado caer por negligencia ni por conducta impropia.
Cuando el Río de las Preocupaciones se desbordó inundando el Valle de las Finanzas, la gente no pudo dejar de notar que los que viven en la Avenida de la Fe son los que más rápidamente se reponen de las pérdidas. El hogar de los precursores está sobre una loma que resulta una altura protectora. Cuando el huracán Ansiedad desató un aluvión de tensiones en las regiones pobladas, muchas casas perdieron el techo, otras se desplomaron del todo. Pero la pequeña casita número 777 ha resistido todas las amenazas y sigue en pie.
Una tarde del invierno pasado, llovía torrencialmente y el firmamento surcado de relámpagos dejaba oír los dramáticos tambores de los truenos. Era uno de esos días en que los corazones buenos abren las puertas que conducen a los aposentos interiores y empiezan a hurgar sus cofres de tesoros inmateriales para rescatar los recuerdos más valiosos.
Linda estaba horneando una de sus deliciosas tortas. Sandalio y Lolo estaban repasando viejas experiencias que eran en realidad, credenciales de su ministerio cristiano. Sandalio hizo un comentario que merecía haber trascendido mucho más allá de las paredes de la vivienda:
-Aún si no hubiera otro salario para mí, ya estoy bien pagado. La satisfacción de servir a Dios es una recompensa en sí misma. Sé que lo mejor está por venir, pero Jehová no me debe nada.
Aunque es razonable esperar que nunca muera, por las dudas, Sandalio Caminos compuso una posible leyenda para su presunta tumba, en caso de un supuesto deceso, a fin de seguir dando testimonio desde la tierra del silencio:

Epitafio

“Hoy llego a tus umbrales, y haz de albergarme, Muerte.

A mi pesar me entrego desarmado e inerte.
Me recibes dormido, pero no vencido.

Un Redentor que nunca a los suyos olvida,
desgarrará tus sombras, reclamando mi vida.

Entro en tu reino mudo, pero dejo en mil surcos
la palabra de vida que es la sagrada mies.

Pues tu puerta es la única, en mi andar denodado,
a la que habré llamado solamente una vez”.

Lolo recordó a sus amigos de la adolescencia y a sus compañeros de clase, los que lo miraban de un modo tan extraño cuando se enteraron de sus planes de dedicarse a la predicación. Todos se habían esforzado por metas muy distintas y habían realizado muchas aspiraciones. Lolo parecía no haber obtenido nada de la vida en comparación con ellos. Hasta hoy, a los ojos de sus amigos de otros tiempos él es un forjador de ilusiones sentado en el escalón más alto de una escalera hipotética, masticando caramelos imaginarios, mientras se ajusta los cordones de unos zapatos que jamás llegarán a estar en sus pies. Lo acusan de no vivir de acuerdo con la realidad. Pero la realidad presente, que es la única que ellos visualizan, se hará humo en el futuro cercano. La realidad que Lolo espera, se divisa como humo ahora, pero está compuesta de todos los hechos que fundamentan el porvenir.
En aquella tarde de invierno, llena de miradas retrospectivas y de conclusiones introspectivas, mientras la lluvia seguía golpeteando rítmicamente los cristales de la ventana, Lolo Gramos, impulsado por su irrenunciable convencimiento, resumió en verso sus evocaciones.

TODO Y NADA

Llegué a la cabecera del puente entre dos mundos
y el agua del bautismo me saturó de paz.
En el camino viejo quedaban mis amigos,
se abrió una brecha grande, no me llamaron más.

Los saludé de lejos y los dejé en su esfera
persiguiendo sus metas con porfía y tesón.
Yo llevaba la Biblia como brújula cierta
y un himno de esperanza dentro del corazón.

Marujita Lozada, siempre graciosa y fina,
dejó la joyería de la calle Amengual.
Vive en un chalet amplio y tiene cuatro hijos;
puso un negocio propio con un gran capital.

Alicia, que soñaba con triunfar en la ópera,
va recogiendo aplausos, tiene un gran porvenir.
Sofía es periodista; Reinaldo es abogado;
yo anuncio un paraíso que pronto ha de venir.

Otros que se empeñaron en distintas carreras
lograron su objetivo, como Luis Tejedor,
cirujano famoso, y Paquito Silvera
que ganó seis medallas por ser un buen nadador.

Aquel Pichuco Antúnez, que atribulaba el barrio
apedreando los vidrios de cualquier ventanal,
ahora es un teniente que luce sus galones;
tal vez nada le impida llegar a general.

Fueron buenos amigos, yo también los quería.
La vida con sus muchas sendas nos separó.
Eligieron las metas tangibles y cercanas;
les parecía utópico lo que ofrecía Dios.

Me miraban con lástima, ¡qué vocación tan simple!
ni títulos, ni aplausos, ni ambición terrenal.
Discutí con el oro; lo traté de usurero.
No competí por lauros, porque me daba igual.

Quizá no crucen nunca a esta orilla del río,
porque ellos ven las cosas de tan distinto modo.
Van a seguir gozando del todo de su nada,
¡ Yo en cambio amo esta nada que me lo ha dado todo!

Álef Guímel
Del libro “Tiempo de Reunir Piedras”


Ese libro de Lira (Álef Guímel ) está dirigido en especial a los adolescentes, y establece un diálogo a lo largo del libro con un jovencito al que llama Tornillito. ¿ Por qué lo llama así? Ella lo explica: “He buscado una palabra diferente con que nombrarte y se me ocurrió llamarte Tornillito. ¿Observaste que los tornillos son un poquito tercos? Les cuesta entrar en las cosas, como les pasa a los niños. No se ubican a fuerza de golpes, como los clavos, sino sistemáticamente, cuando se les ayuda a girar la cabeza en la dirección que debe ir. Después que uno logra ponerlos en su lugar, ¡qué firmes están, y con qué fidelidad guardan lo que se les ha encomendado!” ( Cap.2 : Hablemos como amigos)

Menciono esto para que se pueda entender mejor el título del relato…espero les haya gustado conocer a estos Tornillos tan útiles.

Un abrazo muy fuerte, atornillado con amor fraternal
Nancy

sábado, 1 de agosto de 2009

Mar de Amigos...y un Video especial...


¿Me permiten compartir algo muy personal?...bueno…sí, es verdad…todo lo que pongo aquí es muy personal, pero esto tiene que ver con los afectos, con el cariño y la amistad de otros muchos hermanos y amigos que a través de este medio, fueron asomándose a mi vida, o como decía en una entrada anterior, se acercaron a mi ventana al mar…¿recuerdan?...en la parte final del poema que les dejé ese día dice así:

Te dejo mi ventana al mar...
es también una ventana a mi alma...
Te dejo los regalos que trajeron las olas...
es también parte del consuelo
que el Hacedor del cielo
derramó en esta tarde gris...
tarde azul…
tarde esperanza...

Bueno, resulta que a raíz de ese poema algunos amigos organizaron una sorpresa online para quien les escribe y la verdad es que fue muy emotivo. Con algunos llevo tiempo comunicándonos via mail, a otros no sabía que me habían permitido también asomarme a sus ventanas y todos han sido muy generosos en querer compartir retazos de mar de distintas maneras. Luego supe que la idea surgió de Rosa Amado de España, que junto a Jully, hicieron una convocatoria de amigos para preparar la sorpresa. Mejor dejo que Rosita lo cuente, esto dice un mail suyo:

“Hace poquito (escasas semanas), mientras contemplaba la belleza del mar desde un barco que nos llevaba de excursión a mis dos hijas y a mí, pensé mucho en ti. En realidad, no podía dejar de pensar en ti. En tu amor por el mar. Algunos de mis pensamientos fueron los siguientes: "cuánto disfrutaría aquí Nancy", "cuánto desearía poder compartir este mar Mediterráneo con ella, entonces para mí este mar sería aún más bello", "qué lindas conversaciones podríamos tener mientras este barco nos lleva a recorrer las costas de esta preciosa isla". El viaje duró varias horas y mis pensamientos me llevaban a ti: "¿cómo podría llevarle este hermoso mar a Nancy? Me puse a hacer muchas fotografías para enviártelas vía e-mail. En esas andaba cuando...chateando con la querida hermana Jully le comenté mi deseo de regalarte un mar para ti solita formado con las fotografías que para ti había hecho con todo mi cariño... Ya puedes imaginar como siguieron las cosas..."

El resultado fue, como lo explica Christian, de Buenos Aires: "Muchos bloggeros TJ nos hemos puesto de acuerdo para darle una dedicatoria a nuestra queridísima y conocida amiga Nancy Caballero, le daremos la sorpresa de publicar todos una entrada dedicada a ella."

Fue así que, en sus Blogs pusieron fotos del mar, algunas fotos personales de sus propios viajes, otras fotos con frases, algún artículo interesante relacionado con el mar, prosas con viajes al paraíso con un vislumbre del encuentro con amigos que nos espera; poemas muy bonitos, como el que escribió Jully, una maestra en escribir acrósticos:

http://jully-tjmundial.blogspot.com/2009/07/mar-de-nancy_9475.html
Jully, Julia Montenegro, España

Y hasta hubo quien amorosamente preparó una canción, Cristian y su esposa Esther (Barcelona, España), y la grabaron, es el video que engalana esta entrada . Ha sido muy emotivo, el gesto en si mismo, y la canción es muy bonita, la emoción desbordó como marea alta en mis ojos. El mensaje de ellos dice en parte:

"Querida Nancy:
Queremos trasladarte nuestro amor desde miles de kilómetros de distancia.Como sabemos el deseo tan grande que tienes de ver y sentir el mar cerca de ti, te mandamos estas fotos y estos videos para que de una manera virtual puedas disfrutar de el. Mi esposo Cristian ha querido hacerte un pequeño regalo.Ha compuesto una canción especialmente para ti , se llama "El Mar de Nancy"
Esperamos que te guste. Esta es la letra de la canción:

"El Mar de Nancy"

"Lleva el mensaje a cualquiera,
de la forma que tu puedas.
Le pide fuerzas a Dios para aguantar,
y Dios le sostiene sin vacilar.

Tu amor por la verdad no cambiará,
por mas que el mundo te trate mal.
Su anhelo es poder ver el Mar,
pues muy pronto cerca vivirá.

(Estribillo)
Muy pronto Jehová nos librará
del sufrimiento y toda la maldad.
Y tu, Nancy, podrás correr con anhelo,
con salud y una grata hermandad."

Sigo llorando cada vez que la escucho…


En una carta Lira dijo: "El barro se ablanda con agua. El barro humano se ablanda con lágrimas.” Por eso digo que ya ni barro soy…soy barro diluido con lágrimas. Pero no sólo lágrimas de dolor. Sino también de emoción, como las que he andado vertiendo generosamente estos días.


Normalmente guardo en el corazón, calladita, todos los gestos de amor y amistad que siempre envían los queridos hermanos y amigos de esta bendita hermandad mundial. No sólo porque son muy personales, sino porque no quiero que de manera alguna pueda malinterpretarse como atención indebida a un simple mortal. Como dice Job 33:6: "¡Mira! Yo soy para el Dios [verdadero] justamente lo que tú eres; del barro fui formado, yo también." . No estoy haciendo nada especial, y si se puede aguantar y sobrellevar cada día es por la ayuda de Jehová, sería imposible de otro modo. (Salmo 94:17-19)


Pero, como decía el párrafo 10 del estudio de La Atalaya de esta semana, sobre los ángeles: “Claro está, Jehová puede enviar un ángel a socorrernos, pero quizá decida intervenir de otra manera. Por ejemplo, puede motivar a algún hermano para que nos ayude o consuele.”
Y es precisamente eso lo que hace con cada uno de sus mensajes y gestos de amistad. Así es que una vez, como en todo lo bello que toca nuestras vidas, damos gracias a Jehová por todas su dádivas buenas y bondad amorosa e inmerecida. Sí, “Bendito sea Jehová, que diariamente nos lleva la carga” (Salmo 68:19)


Han sido tantos los detalles de los hermanos, que nobleza obliga, no puedo dejar de mencionarlos y agradecerles.Había preparado unos versos para agradecerles y estaba intentando dejárselos individualmente, pero mejor dejárselos aquí porque temo no haber visto alguno, además, lo que dice el poema es válido para cada uno de ustedes que forman este


Mar de Amigos


Estoy aquí…
sentada frente a este Mar de Amigos
con una expresión similar
a la de mi primer encuentro con el Mar:
Tanta belleza e inmensidad
conmueven hasta lo más profundo
y no atinan las palabras a expresar el sentimiento
pues huyen, tímidas, ante su incapacidad
de plasmar lo que desborda el corazón.

Gracias por este gesto de amor,
gracias por envolverlo en encajes de espuma…
son olas que besan mi playa,
acarician el alma y llenan de paz azul.

Deudora soy de todos
y esto que traen con tanto amor….
me queda tan grande como un mar infinito
a una playa de un solo granito de arena…
que al final, ya ni playa es…
solo una motita de arena…


No sé en qué momento se dieron cita
y aunaron esfuerzos, cariño y amistad y entretejieron
sus palabras, con fotos que algunos tomaron para mi…
y formaron este Mar de Amigos
y llenaron estas manos de caracolas bellas
que llevan sus nombres, historias y lealtad.
Gracias por recordarme en medio del trajín de sus días…
Gracias por este Mar que trajeron hasta aquí…
Han dejado un arrullo dulce y suave
de brisa marina y cantos de gaviotas…
han pintado de azul sereno toda rendija de dolor
y hacen que sea más leve la herida abierta
de estas espinas que amarran el cuerpo,
pero que no pueden impedir que el espíritu
leve anclas y surque este mar que amo,
que está en lo que miro, que está en lo que ansío,
que desborda de gratitud y no alcanza a expresarlo…
sólo puedo darles lo que hay adentro…
no es mucho, pero está lleno de amor,

por ustedes y nuestro bendito Hacedor…


Yo también vengo a dejarles mi mar…


Nancy (Dáleth)


Gracias por sus mensajes, ha sido una preciosa y emotiva sorpresa:


Rosa Amado, Galicia, España
http://rosamado.blogspot.com/2009/07/el-mar-de-nancy_28.html


Esteban y Lia, Rosario, Santa Fe, Argentina
http://estebanrex.blogspot.com/2009/07/el-mar-de-nancy.html


Joel, Caracas,Venezuela
http://jor-el.blogspot.com/2009/07/un-mar-para-nancy.html


Jorge y Katti, Perú
http://esperanzaparaunmundosinfronteras.blogspot.com/2009/07/nancy-tienes-un-mar-de-amigs.html


Luciana, Argentina
http://mimundorosa-luciana.blogspot.com/2009/07/el-mar-de-nancy.html

Juan Carlos, Sevilla, Andalucía, Spain
http://ismaserg.blogspot.com/2009/07/el-mar-de-nancy.html?zx=dd8d6db4b068049b

México

http://diariodeunmixteco.blogspot.com/2009/07/el-mar-de-nancy-nos-regala-el-purpura.html


Romina, Buenos Aires, Argentina
http://romirokr.blogspot.com/2009/07/el-mar-de-nancy.html

Christian, Buenos Aires, Argentina
http://weblogtj.blogspot.com/2009/07/el-mar-de-nancy.html


Daniel, Granada, España
Esteban, Argentina

http://esteban09.jimdo.com/el-mar-de-nancy/

Y gracias a los que cada día están haciéndose presentes, de una manera u otra, con un mensaje, una llamada…con tan sólo seguir asomándose a mi ventana al mar…gracias por su cariño y amistad, por tanto estímulo y consuelo, es una muestra más de la marca distintiva del pueblo de Jehová que Jesús señaló: En esto todos conocerán que ustedes son mis discípulos, si tienen amor entre sí”. (Juan 13:35)

Con gratitud y amor fraternal

Nancy

jueves, 23 de julio de 2009

Tejiendo sueños













Y bueno...habrá que encontrarle algún lado positivo a este frío tan intenso que no me deja levantar hasta la PC..así es que aquí ando haciendo algunas artesanías a Crochet...pero como veo tan borroso (por las cataratas), entonces digo que esto es tejido en Braille, sí esto es un verdadero tejido táctil: tejo de memoria, muchas veces tocando para saber dónde va el siguiente punto.

Son cosas chiquitas: canastitas con flores o algún muñequito, con un letrerito que dice Te quiero o cosas así. También llaveros o adornos para mochilas en forma de bolsitos, zapatitos y pantuflas...éstos últimos son tan chiquitos que le van bien a Lulita, que siempre me acompaña, como verán en las fotos, tengo que tener cuidado de que no cuelguen los hilos para que no los agarre para jugar.

Aún no vendí ninguna, hay que hacer varias para que los promotores de ventas (Waldo y Damita) se encarguen de distribuirlos, jajaja...bueno...creo que soy demasiado optimista...de todos modos...se aceptan pedidos, jajaja...

Obviamente no nos vamos a hacer ricos si podemos vender estas cositas, jaja...pero al menos servirán como parte de la ofensiva diaria para ganar pequeñas batallas a las circunstancias estas que amarran a una cama y a la debilidad progresiva. Tengo que apoyar los brazos en almohadones grandes para poder sostenerlos, tejo un punto, descanso un rato y así...y bueno...despacio se llega lejos.

El pobre respirador parece que hace más ruido al cansarme más al tejer, es diferente al ruido que hace cuando estoy en reposo del todo, sin moverme. Pero no me quejo, doy gracias de poder tenerlo y así ayude a tener una mejor calidad de vida, en lo posible.

Uhmmmm...no tengo un poema que dejarles sobre tejidos...así es que trataré de improvisar algo mientras vamos


Tejiendo sueños

Una vareta, un descanso,
otra vareta...descanso...
se escapa el pensamiento
enredado en hilos de sueños...

Tal vez esto que tejo llegue
a tus manos en forma tangible,
pero van también puntos invisibles
de afán y lucha por no dejar
ir los días sin dejar una pequeña
huella que atestigüe
que no fueron en vano.

Una vareta, un descanso,
otra vareta...descanso...
Tal vez es demasiado simple...
pero es otra manera de aferrarse
a la vida, disfrutando de lo que
aún pueden hacer las manos
y acercarte mensajes al alma
mientras vamos tejiendo sueños...

Dáleth
23 -07-09


Gracias por permitirme compartir estos pequeños detalles cotidianos, son pequeños disfrutes, ya no puedo tejer como antes que hacía ropa, cortinas, manteles, tapetes, etc, etc, a crochet...pero Jehová mediante, en el Paraíso habrá mucho para hacer también en esta faceta manual y tantas otras que recién entonces podremos desarrollar y cultivar...ahhhh!...qué hermosa perspectiva!..¿Qué les gustaría hacer a ustedes?...vayan pensando que ya falta muy poco para lograrlo...

Un abrazo muy fuerte, arropado por madejas de cariño

Nancy

lunes, 20 de julio de 2009

Ventana al Mar



Ventana al Mar

La persiana del viejo ventanal seguirá
cerrada hasta que pase el frío.
No sé si será por tanto tiempo sin ver el sol,
o por este invierno que quita fuerzas,
que apaga iniciativas que van quedando guardadas
en amarillas páginas no escritas
que la emoción intenta rescatar del olvido...

No sé si será nostalgia de días no vividos...
no lo sé...pero estoy aquí intentado
arrancarle un arco iris a la bruma
que se asentó en mi pecho
en esta tarde gris de domingo.

Le pediré a los sueños que me presten
su paleta de colores, y con una gama de azules
dejará la persiana de ser lo que es
y se transformará en un amplio ventanal al mar, (*)
con encaje de espuma en sus olas bravas,
que dejarán regalos en la serena playa:
caracolas de todos los tamaños, estrellas y conchitas;
calma y sosiego a quien escribe estas palabras en el viento.

Las gaviotas se sumaron al paisaje trayendo mensajes
del otro lado del océano; no hay distancias
ni tiempo que el pensamiento aferrado a sus alas blancas
no cruce en raudo vuelo y acerque sentimientos.

Así se hace más fácil sobrellevar los días:
dejando que estos ojos cansados se recuesten
en un horizonte azul, mecido en suaves olas,
y que la inquietud se esfume ante el canto
eterno de este mar tan inmenso como etéreo...
pues lo llevo dentro...

No sé si es la fatiga del barro diluido que soy...
no sé si es este frío que encadena anhelos...
sólo sé que no quiero apagarme como candil al viento...
por eso escribo estos versos:
es una forma de calmar la herida
pintando sueños, aferrándose a la esperanza...
dejando el corazón al abrigo del Dios de todo consuelo,
´a la sombra de cuyas alas me refugio
hasta que pasen las adversidades.´
(Salmo 57:1)

Te dejo mi ventana al mar...
es también una ventana a mi alma...
Te dejo los regalos que trajeron las olas...
es también parte del consuelo
que el Hacedor del cielo
derramó en esta tarde gris...
tarde azul...
tarde esperanza...

Dáleth
19-07-09
(*) Vivo muy lejos del mar...