miércoles, 6 de septiembre de 2023

Instrucciones para rellenar el vacío

 

Primeramente, seleccione el vacío a llenar, si se trata de un espacio físico, mejor busque ideas en internet, con su vasta extensión de opciones de ambientes de todos los tamaños.

Una vez delimitado ya el espacio emocional, del alma, o sueños que desea rellenar, determine la causa que provocó ese vacío.

Si la razón excede a sus posibilidades de resarcir la situación, no le dé vueltas al asunto y busque rutas alternativas que le permitan seguir viaje a la meta que desea.

Si hay alguna medida razonable que pueda tomar para cerrar la brecha abierta, vístase de humildad y valor y no dude en hacerlo.

Si humanamente no hay modo de llenar el vacío, por la ausencia de alguien amado, por ejemplo, arroje todo el peso del dolor en brazos de Quien sí puede hacer algo al respecto. Recoja los pedazos que queden de usted, ore…y siga…respire hondo…y siga…descanse…y siga…fortalézcase…y siga…

Si el vacío ha sido causado por el vuelo de sueños no alcanzados, no renuncie a que quizás un día pueda lograrlos, no deje de trabajar por ellos, así sea sólo con mínimos aportes cotidianos que sus fuerzas le permitan, no deje de intentarlo. El sólo esfuerzo y perseverancia diarios, no dejan espacio para el vacío…

Si el lugar desierto a rellenar fue causado por las fuerzas que se han ido por las primaveras acumuladas, o por las batallas libradas con dolencias implacables, dé gracias por vivir para contarlo. Haga un inventario de momentos felices, no sólo los pasados, sino especialmente los actuales, por ínfimos que le parezcan. Si aún puede ver el color de las flores, escuchar el canto de los pájaros, sentir los besos del sol en la piel, o simplemente ver el paisaje por una ventana, aunque sólo sea la de su patio interior, llene su espacio de gratitud y disfrute cada detalle pequeño, pues son muestras del gran amor de Quien nos creó…

Propóngase encontrar siempre motivos para rellenar los vacíos con gratitud y busque siempre alguna manera de dar, por más pequeño que sea el detalle…céntrese en dar de su tiempo, dar amor, cariño, un abrazo, una sonrisa, una flor…

Dar tiene ese maravilloso efecto de traer a cambio felicidad…y ella tiene el don de rellenar vacíos…(Hechos 20:35)


Nancy            





jueves, 13 de julio de 2023

Parte Médico


Desde hace mucho tiempo (años) vengo con síntomas cariovasculares molestos: dolor de pecho, falta de aire, sensación de desmayo, aturdimiento, arritmias, fatiga, etc. Pero ahora se intensificaron más.

La causa son las lesiones que causa la Arteritis de Takayasu (inflamación y daño de la Aorta y ramificaciones). Es una enfermedad crónica, progresiva y degenerativa, que ya lleva 30 años de evolución.

La presión arterial se me hizo un caos, por ejemplo: 16/6, 15/5,12/4, 9/3... Así ando últimamente y me siento muy mal...

Esta semana me hicieron varios estudios muy minuciosos. Lo que está causando esa presión es una *doble lesión en la válvula aórtica: estenosis y regurtación aórticas moderadas.* 
Eso hace que la válvula ni se abra bien ni cierre bien. 

El médico nos explicaba que es como si la Aorta y el ventrículo izquierdo fueran un solo caño.

Si a todo eso le sumamos Miastenia Gravis severa, Polimiositis y Fibromialgia...con todo el universo de síntomas que producen... bueno... así estamos...

Sabía que en algún momento habria que hacer un cambio de válvula y que eso mejoraría los síntomas y pronóstico. Pero me costó un poco asimilar que no me pueden tocar, por todo lo antes mencionado de base. 

No sé por qué me costó si yo sé que cualquier cirugía es prácticamente imposible con la Miastenia así y todo lo demás...pero bueno...no dejó de ser difícil de asimilar...

Pero ya está siendo procesado...lo único que sé es que tengo que seguir... disfrutar cada momento y mantener la vista fija en la esperanza que tenemos al frente...

Jehová es leal y siempre da a sus siervos las fuerzas para aguantar...es una realidad de cada día...

Gracias por el cariño con que siempre nos abrigan el corazón...

Los quiero mucho...

domingo, 26 de febrero de 2023

Reencuentros...

Tantas emociones agolpadas no me dejan dormir,
Tengo que volcarlas en palabras 
para poder el corazón descomprimir…

Siento que ha sido un reencuentro de sobrevivientes el que vivimos anoche con amigos queridos de las congregaciones de Banda del Río Salí y El Chañar. No sólo por el primer abrazo post pandemia, sino, porque conozco sus luchas, reí sus risas, lloré sus duelos, aplaudí sus logros, lloré sus llantos…hay mucho compartido que el tiempo no ha borrado y el sentimiento sigue intacto 20 años después…

Un abrazo fuerte y sentido que te arremolina en el tiempo y te pasan imágenes en un instante, flashes de momentos, de historias…tantas alegrías y tantos duelos…tanto ganado y tanto perdido en el camino por cada uno…y están allí, como árboles en pie junto al camino, refrescando con su sombra a este corazón cansado y agobiado que no ha dejado de amarlos…

Muchos nos han dado tanto…me han cuidado noches y días en internaciones, han socorrido en momentos de angustia, compartido lo que tenían y arropado con tanto amor…no olvido…gratitud eterna por ellos…

Como quien regresa de la muerte (o que vive ahí, al filo todo el tiempo), verlos ha sido como un anticipo de la felicidad que sentiremos en ese primer abrazo luego que Armagedón haya pasado y la que sentiremos al recibir de nuevo a tantos que lloramos y no hemos olvidado…

Gracias Jehová por hacer posible que, en medio del caos de este mundo, haya tanto amor en tu pueblo. Gracias por poder vivirlo un día más…y por la eternidad que nos aguarda…


*“Así que, hermanos, a los que amo y estoy deseando ver, que son mi felicidad, manténganse firmes, amados míos.”*
(Filipenses 4:1)

Nancy
26-2-23

domingo, 20 de noviembre de 2022

De niña quería...

Me cuesta un poco desandar el tiempo
y desempolvar recuerdos tapados por nubes de olvidos…
Algo bueno debe haber habido para rescatar
de la memoria difusa y así recordar lo que de niña quería…

Tal vez sólo pueda evocar los momentos en frases sueltas:
El amor y cuidados de mi madre,
Los viajes al campo a la casa de los abuelos,
La finca de naranjos y el perfume
de azahares adueñándose del aire…
Las piedras bonitas recogidas en los ríos y caminos,
Las flores silvestres, pequeñas,
que se adueñaban de mi atención…
Los atardeceres subida a las ramas de algún naranjo…
El budín de pan que hacía mamá…
Las humitas en chala de la abuela.
Acostarme en la terraza en las noches de verano
y dormirme tapada de estrellas,
Y quizás algún día poder viajar entre ellas…
Las conversaciones sin noción del tiempo con Dios,
La paz inmensa en la que me envolvía…
Buscar formas en las nubes,
Sentir el viento y el sol en la cara…
El cielo, siempre, el cielo estrellado,
Y la luna: dueños de mi fascinación…

Esas cosas que tanto disfrutaba
Son las que siempre quería…
Las que aún conservo adentro…
Las que siempre quiero…
que se suman a todas las que ahora ansío...


Nancy
20-11-22


sábado, 3 de septiembre de 2022

Versos y azahares

 



Pareciera que las palabras rehúyen al buscarlas, 
no sé si ha quedado vacío el cofre de tesoros
o sencillamente se ha agotado el pensamiento,
y no hay fuerzas para ir en busca de palabras 
que hilvanen en rimas el sentimiento…

Más sé que por sobre toda mustia hoja caída,
Viene la savia empujando nuevos brotes,
Vislumbrando promesas de primavera…
Vienen versos perfumados de azahares
Que dejaré en tus manos 
vestidos de pétalos blancos…


Nancy
3-9-22


domingo, 17 de julio de 2022

A veces...

 


 A veces quisiera ser una persona normal. Digo a veces porque hasta eso es pedir mucho y no me ilusiono con lo que no se puede. Tengo que ahorrar energías para lo que sí. 
Pero de vez en cuando quisiera poder tener fuerzas para levantarme normalmente sin que prepararse un desayuno suponga un tremendo esfuerzo…y así, cada pequeño detalle de un día normal: cambiarse, arreglarse, salir de compras, preparar la comida, esperar a la familia con todo listo, predicar, trabajar, estudiar…todo eso sólo con el esfuerzo normal que supone cada tarea, con el cansancio normal y propio que siente todo mortal…sería lindo…poder hacer todo eso y no sólo desearlo...

Pero nada es así conmigo, y sé que a las personas normales, con buena salud, les debe costar mucho entender o tener una remota idea de lo que es vivir cada minuto al límite de tus fuerzas, a puro dolor y agotamiento extremo, todo el tiempo…y más difícil aun cuando te ven bien arregladita (bueno, lo que se puede) y con la sonrisa de oreja a oreja.  Y no es máscara la sonrisa. Es real. Porque a pesar de todo, soy feliz y disfruto cada pequeño detalle bueno, por más chiquito que sea.

Lo cierto es que, a pesar de la buena disposición de ánimo, vivir cada día resulta ser como un deporte extremo: “Vive al límite”. Y si estás algo mejor, salir y tratar de hablar y hacer algo…es como un salto al vacío…no sabes cómo saldrás de esa…a lo sumo juntas fuerzas para empezar…no sabes cómo llegarás, o si podrás…

A pesar de todo, la creatividad parece que tiene vida propia en uno, un universo paralelo: en cada momento con algo de fuerzas las manos buscan qué hacer dentro de los barrotes que impone esta Miastenia (y todas las otras plagas) tan avanzadas: algo que tejer, algún detalle para las niñas, alguna manualidad o artesanía, alguna tarjeta para hacer…algo que escribir…Gracias a Jehová Dios que aún puedo escribir algo de vez en cuando…porque hablar se hace cada vez más agotador y suelo desistir de conversar aun antes de empezar…

Te digo esto porque probablemente nunca lo sabrás si no te cuento, y no quiero por favor, que mal interpretes mi silencio con falta de interés, sólo no tengo fuerzas para hablar, ni mantenerme sentada siquiera para conversar a través de una pantalla o teléfono o un chat…como lo hace cualquier persona normal…
No es falta de amor…sólo estar exhausta, aún sin hacer nada…y eso es lo terrible y que costó asimilar…pero luego de remar 29 años y apagarte cada día más…ya lo asumes…y entiendes…

De vez en cuando alguna isla de buen tiempo me sorprende y la aprovecho, como sucedió con el hermoso viaje a Buenos Aires. Uno va aprendiendo que hay disfrutar de cada buen momento porque no sabes si se repetirá. Y eso es así con todo, en cada esfera de la vida y relación.
Ya lo dijo el Sabio hace miles de años: “Todo lo que puedas hacer, hazlo con todas tus fuerzas, porque no hay actividad ni planes ni conocimiento ni sabiduría en la Tumba, el lugar adonde vas.” (Eclesiastés 9:10)

Aunque la muerte es en lo que menos quiero pensar, siempre anda dando una vueltita y me recuerda la fugacidad de la vida…así que mejor…llenar cada momento de todas las cosas bellas que anhelo y que en breve no serán solo un deseo, sino lo normal, aún para mi…

“Abres tu mano y satisfaces el deseo de todos los seres vivos.”
(Salmo 145:16)


Nancy
17-7-22